De acuerdo con la Ley de Inversión Extranjera, la Secretaría de Economía es quien autoriza el uso de denominación o razones sociales. Hacer este trámite es el primer paso para quien pretenda constituir una sociedad o asociación.
Por denominación o razón social se entienden las palabras que conforman el nombre de la sociedad o asociación; estas permiten que se distingan de otras, sin considerar su especie.
La autorización de uso de denominación o razón social consiste en la resolución favorable que faculta dicho uso; se solicita comúnmente a través del fedatario público.
Lo anterior, no quiere decir que solo el fedatario pueda solicitar la autorización, sino cualquier persona puede hacerlo, no obstante, se sigue dicha tendencia puesto que se solicita indicar el fedatario público relacionado con el trámite.
El trámite no tiene costo y es electrónico a través del portal Módulo Único de Autorizaciones, básicamente se debe de contar con la firma electrónica avanzada.
Resulta de suma importancia incluir en la denominación o razón social elementos distintivos, a fin de evitar confusión con las ya existentes. En caso de que sean idénticas o parecidas en grado de confusión, no serán autorizadas y se tendrán que replantear las propuestas iniciales.
Este es el primer paso para la constitución de una sociedad o asociación, por lo que para evitar dilatar el tiempo, es recomendable realizar una búsqueda preliminar con efectos informativos respecto de las coincidencias con las denominaciones o razones sociales existentes.
¿Qué sigue después del uso de denominación?
Al momento de constituirse la sociedad o asociación para la cual se solicitó la autorización, el fedatario público responsable dará aviso de uso de la misma; el objetivo de este paso es que la Secretaría tenga conocimiento de su uso.
Una vez concedido el uso de denominación, tendrá una vigencia de 180 días; este es el plazo para que el fedatario proceda con el aviso de uso correspondiente; de no presentarlo, la secretaría dejará de reservar el uso exclusivo de la denominación o razón social.
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