La Sociedad Anónima es una de las siete sociedades mercantiles reconocidas por la legislación mexicana, y la más común entre ellas; por lo que generalmente se le refiere como la sociedad “tradicional”. La Sociedad Anónima se crea con la intención de realizar una actividad económica con fines de lucro, es decir, con el deseo de generar utilidades.
En virtud de que al constituir una Sociedad Anónima se crea una personalidad jurídica distinta e independiente a aquella de los accionistas, ésta adquiere la posibilidad de tener un patrimonio propio, así como la capacidad para adquirir derechos y obligaciones por su cuenta. Y para su correcto funcionamiento, ésta opera a través de 3 órganos sociales: el Órgano Deliberante, el Órgano de Administración y el Órgano de Vigilancia.
Al Órgano Deliberante de la Sociedad Anónima se le identifica como la Asamblea de Accionistas, que representa el órgano supremo de la sociedad, del cual emanan las decisiones para realizar todos los actos destinados al cumplimiento de su objeto social. Tal Órgano acuerda y ratifica todos los actos y operaciones de la sociedad a través de sus reuniones, mismas que tienen requisitos de quórum, convocatoria y voto.
La Asamblea de Accionistas será Ordinaria o Extraordinaria en vista de los temas del órden del día a tratar. El puesto más importante es el de Presidente quien se acompaña por un Secretario y uno o más Escrutadores; quienes se designan en la misma Asamblea de Accionistas.
El Órgano de Administración de la Sociedad Anónima
Por su parte, el Órgano de Administración de la Sociedad Anónima llevará la dirección de los negocios sociales de la sociedad, así como tendrá la representación legal de la misma ante terceros. Tal función podrá llevarse a cabo a través de un Administrador Único de forma individual o a través de un Consejo de Administración, integrado por dos o más miembros que actúen de forma colegiada, designados en el acta constitutiva de la sociedad y ratificados, nombrados o removidos mediante Asamblea de Accionistas.
El Órgano de Vigilancia de la Sociedad Anónima tendrá como función principal la supervisión de las actividades de gestión y representación que desempeña el Órgano de Administración. Tal tarea se lleva a cabo a través del cargo de uno o más Comisarios designados desde el acta constitutiva de la sociedad. Todos podrán ratificarse, nombrarse o removerse mediante Asamblea de Accionistas o por medio de deliberación del Órgano de Administración.
De aquí que para lograr el correcto funcionamiento de la gestión y administración de una Sociedad Anónima, habrá primero que tener noción de la estructura orgánica que la conforma, por lo que conocer lo anterior te proporcionará claridad sobre la terminología técnico-jurídica adecuada en el marco societario.
0 comentarios